Pensar en cómo la tecnología está cambiando la arquitectura empresarial es una demanda obligatoria para las empresas que buscan el éxito en el futuro. Los cambios en procesos como la digitalización de archivos y el uso de robots para consultas de datos e informes inteligentes están contribuyendo a la creación de nuevas estrategias empresariales que mejoran la productividad de la cadena logística.
La tecnología está creciendo de manera exponencial, mucho más rápido de lo que la mente humana puede comprender. En teoría, cada 18 meses, una computadora puede duplicar su capacidad de procesamiento. Además, cada nueve meses, la cantidad de información transmitida también se duplica, y cada 13 meses, la cantidad de datos almacenados por centímetro cuadrado de la unidad de disco también se duplica.
La revolución tecnológica ha cambiado el modelo tradicional de la arquitectura empresarial de una cadena de valor vertical al modelo de pilas. La forma en que se diseñan los negocios influye directamente en el desarrollo de una empresa. Iniciar la transformación digital en una empresa implica buscar mejoras en tres áreas fundamentales: mejorar el procesamiento de datos, mejorar la comunicación y mejorar el almacenamiento digital.
Las inversiones en tecnología de la información siempre tienen impactos positivos en una empresa moderna que busca mejorar la productividad, optimizar procesos, mejorar continuamente y obtener rendimiento de capital. Entre las inversiones más comunes, destacamos: software, hardware, seguridad de datos, redes, profesionales calificados, entre otros.
Según revela un estudio de la Fundación Getulio Vargas (FGV), por cada 1% invertido en tecnología de la información, el beneficio de la empresa aumenta un 7% después de dos años. Por lo tanto, las empresas deben buscar conocer las tecnologías desarrolladas en el país que contribuyan a transformar el modelo de negocios, hacer que los procesos operativos sean más precisos, rápidos y simplificados, y observar las últimas novedades en el mercado global, como el uso de soluciones como el big data, el Internet de las cosas, la inteligencia artificial y la Industria 4.0.
A pesar de la apariencia disruptiva que pueden transmitir estas transformaciones, crean oportunidades para nuevos negocios y nuevos mercados y para la innovación. Están disponibles no solo para las startups, sino también para las empresas establecidas. Por lo tanto, lo que debemos pensar es cómo las empresas pueden prosperar y sobrevivir frente a estos desafíos.
Invertir en tecnología permite, por ejemplo, que los empleados trabajen de forma remota, lo que puede aumentar la productividad individual en hasta un 20%, según los expertos. Un departamento de tecnología de la información avanzado, por lo tanto, genera productividad, reduce los costos operativos, impulsa más negocios y, al final, logra resultados positivos para la empresa. El resultado de esta cadena estructurada no es, por lo tanto, un aumento de gastos. Por el contrario, es un crecimiento exponencial en el margen de beneficio de la empresa. La tecnología marca la diferencia.
Liana Lourenço Martinelli, abogada, con posgrado en Gestión Empresarial y Comercio Internacional, es la Gerente de Relaciones Institucionales del Grupo Fiorde, compuesto por las empresas Fiorde Logística Internacional, FTA Transportes e Armazéns Gerais y Barter Comércio Internacional. Correo electrónico: fiorde@fiorde.com.br. Sitio web: www.fiorde.com.br.
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